Breves: No es ningún secreto que Mercedes es una de las grandes que cuenta con los modelos más pesados, y no hay que irse a un listón muy alto para encontrar barbaries tales como 1,800 o 1,900 kilos, poniendo de ejemplo al CLS o al SL. Y lo peor de todo es que la ganancia ha sido más bien escalonada, es decir, ha ido añadiendo más peso con el tiempo, a pasos agigantados. Eso quiere decir que se han centrado más en evolucionar los motores y los chasis antes que en intentar no aumentar el peso, cosa de la que parece haberse olvidado completamente. Por ello, Mercedes ha reconocido en Automotive News que ya están trabajando en ello.