El pasado 7 de marzo de 2016, BMW Group celebró 100 años de
existir como empresa. Durante este lapso, un pequeño productor de
motores de avión con sede en el norte de Múnich se ha transformado en
un fabricante líder a nivel mundial de automóviles y motocicletas, así
como un proveedor de servicios Premium de finanzas y movilidad. En el
camino a este estatus, BMW siempre ha probado ser una empresa
altamente innovadora que ha definido el cambio y ha tenido visión
hacia el futuro. Hoy en día, BMW Group es un grupo internacional de
empresas con instalaciones de producción y ensamblaje en 14 países en
una red de ventas globales. La empresa hace contribuciones
significativas para diseñar la movilidad individual del futuro.
El observar la historia de BMW Group revela una gran variedad de
eventos y decisiones que ejercieron un impacto sustentable en el
desarrollo de la empresa, y al mismo tiempo es una expresión de su
carácter. Los productos pioneros y las trayectorias estratégicas
tienen una deuda de gratitud con estos momentos visionarios. Todos se
basan en el valor de intentar algo nuevo y de emprender nuevos
caminos. La ambición de la empresa siempre ha sido alcanzar más que
sólo lo básico y competir con lo mejor, mientras que también fomenta
la capacidad de aceptar desafíos y de salir de los mismos con una
fuerza de propósito mejorada.
Elección de caminos independientes que llevan a soluciones innovadoras.
La ambición de lograr características superiores y la buena
disposición de optar por soluciones completamente nuevas y
técnicamente complejas en lugar de conformarse con lo cotidiano ha
determinado el desarrollo de productos desde los inicios de la empresa
hasta el día de hoy. El motor de avión BMW IIIa lanzado en 1917 ya
demostraba potencia, confiabilidad y eficiencia excepcionales cuando
era operado a grandes altitudes. Estas características se basaron en
el diseño básico sólido como un motor de seis cilindros en línea y en
el uso de materiales particularmente ligeros combinados con tecnología
innovadora para el carburador y la ignición.
La empresa también adoptó un camino independiente cuando desarrolló
la primera motocicleta de la compañía. Mientras que otros fabricantes
aún trabajaban con la geometría de las bicicletas, la BMW R 32 se
diseñó de manera consistente alrededor del motor. El modelo presentado
en 1923 fue la primera motocicleta alimentada por un motor Bóxer de
dos cilindros horizontalmente opuesto, contando con una caja de
cambios manual atornillada directamente al motor y transmisión de
potencia a lo largo de un eje en lugar de una cadena o banda. Estos
elementos clave continúan siendo características distintivas de las
motocicletas BMW con motores Bóxer, o flat-twin, los cuales existen
hasta la actualidad.
Después, la empresa también se convirtió en un fabricante de
automóviles en 1928; inicialmente produjo vehículos pequeños con base
en un diseño contemporáneo establecido. Sin embargo, todas las
convenciones comunes del periodo se quebrantaron cuando el BMW 303
formó el primer vehículo de gama media lanzado bajo la marca y
alimentado con un motor de seis cilindros en línea. El modelo se
presentó en 1933 y estableció un perfil que fue diferente al de sus
competidores por el contorno distintivo de la cubierta del radiador,
el cual aún es reconocible hoy en día como la rejilla en forma de
riñón de BMW. Y lo que es más importante, el vehículo también tenía un
bajo peso como resultado del marco tubular con dos tubos inferiores de
secciones transversales diferentes. Éstos fueron utilizados por
primera vez en un automóvil. Por consiguiente, los ingenieros de
diseño refutaron la convicción ampliamente reconocida de que sólo un
vehículo pesado podría proporcionar características de conducción
estable. El BMW 303 era de peso ligero, tenía una rápida aceleración,
realizaba desaceleraciones sin esfuerzos y se conducía en curvas con
un manejo ágil y seguro. BMW patentó el marco tubular con dos tubos y
continuó basando sus automóviles en el principio de optimizar el peso.
Los automóviles de la marca BMW i son el ejemplo más reciente de
construcción inteligente y ligera, innovación poderosa y búsqueda
particularmente consistente de soluciones independientes. La
arquitectura de sus vehículos ha sido especialmente desarrollada para
modelos eléctricos o híbridos conectable, y el diseño combina un
chasis de aluminio con una celda de pasajeros hecha de polímeros
reforzado con fibra de carbono. El enfoque holístico adoptado por BMW
i contribuye a garantizar que BMW Group tendrá una función pionera en
el diseño de la movilidad individual para el futuro.
Asumir responsabilidades, dominar desafíos.
La producción de motores de avión fue prohibida inicialmente en
Alemania después del fin de la Primera Guerra Mundial. A partir de
1918, los motores para camiones y botes, y desde 1920 también los
motores para motocicletas, estuvieron entre los productos que portaron
el logotipo de BMW. Los compradores incluyeron a Bayerische
Flugzeugwerke AG, el cual asumió pronto una importancia considerable
para la marca. La empresa asumió los derechos de la marca en junio de
1922 junto con el logotipo, las instalaciones, y la fuerza laboral de
BMW. El renombramiento integral de la empresa como Bayerische Motoren
Werke AG también formó la plataforma para el desarrollo de un
fabricante independiente de motores y vehículos. Debido a que
Bayerische Flugzeugwerke AG fue fundado el 7 de marzo de 1916, esta
fecha se considera hoy como la fecha en la que se estableció la
empresa BMW.
Poco después del relanzamiento de Bayerische Motoren Werke, los
motores de avión se convirtieron una vez más en el enfoque de agencias
contratistas gubernamentales y sus objetivos militaristas. Al igual
que una gran proporción de la industria alemana, los directivos de BMW
también se guiaron por la ambición de lograr una eficiencia
empresarial conforme adoptaban las condiciones del marco político de
las décadas de 1930 y de 1940. Por consiguiente, la empresa obtuvo el
beneficio masivo de los nuevos esfuerzos de rearme. Comenzando 1939,
convictos, trabajadores forzados, prisioneros de guerra y reclusos de
campos de concentración fueron desplegados en instalaciones de
producción operadas por la empresa.
BMW Group ha asumido su responsabilidad por los eventos durante el
periodo del nacionalsocialismo y estableció iniciativas que han
contribuido a crear conciencia y generar debate público. Cuando se
publicó el libro “BMW – eine deutsche Geschichte” (“BMW – Una Historia
Alemana”) en 1983, la empresa fue el primer grupo industrial alemán en
abrir este capítulo de su pasado al escrutinio y la discusión
públicos. La investigación del periodo entre 1933 y 1945 se llevó a
cabo en el contexto de dos disertaciones, las cuales fueron publicadas
en 2005 y 2008. Además, BMW AG estaba entre los miembros inaugurales
de la fundación “Erinnerung, Verantwortung, Zukunft” (“Recuerdo,
Responsabilidad, Futuro”) establecida en 1999 para compensar a las
antiguas víctimas de los trabajos forzados.
Durante el periodo inmediato posterior a la Guerra, la empresa debía
adoptar un nuevo enfoque en todos los aspectos de sus negocios. La
primera motocicleta post-guerra en la forma de la BMW R 24 sólo salió
de la línea de producción de Múnich en 1948. La fabricación de
automóviles volvió a comenzar en 1952 y el éxito empresarial
anticipado eludió inicialmente a la empresa. En la Asamblea General
Anual llevada a cabo en 1959, la venta de BMW AG a Daimler-Benz AG –
la cual estuvo a punto de ser firmada y sellada – se evitó en el
último minuto. El plan de reestructuración desarrollado bajo los
auspicios del accionista principal Herbert Quandt se basó en la
independencia de BMW AG, en estructuras nuevas, y en modelos nuevos.
El progreso vino con el BMW 1500 como el primer modelo del “New
Class”. Después de que pasaron sólo unos cuantos años, la empresa
había pasado de ser un candidato de absorción a ser una empresa insignia.
A inicios de la década de 1970, cuando el auge tuvo un cese repentino
por la “crisis del petróleo”, los gerentes de BMW superaron los
tiempos difíciles y emergieron de la crisis con una fortaleza
renovada. En Múnich, se abrieron la nueva torre corporativa conocida
como “Cuatro cilindros” y el Museo BMW, y también, una nueva planta de
producción comenzó operaciones en Dingolfing. El BMW Serie 5 se
presentó como el sucesor del “New Class”. Y, de hecho, la demanda
comenzó a adquirir velocidad a partir de 1975. BMW estaba en una
posición sobresaliente para responder con modelos nuevos, capacidades
de producción expandidas y estructuras de ventas optimizadas.
A inicios de la década de 1990, los directivos de BMW volvieron a
verse en una encrucijada. En 1994, siguieron la tendencia general del
sector hacia procesos de concentración y decidieron adquirir la
empresa British Rover Group, con el fin de obtener grupos meta
adicional, con una gama más amplia de automóviles. El intento no se
vio coronado por el éxito. En el año 2000, Rover Group volvió a ser
vendido. BMW sólo continuó con el desarrollo de la marca MINI. Entre
tanto, la empresa se había sometido a una reestructuración y había
comprado el nombre y los derechos de marca de Rolls-Royce Motor Cars.
Justo antes del inicio de la crisis financiera global en 2008, la
estrategia corporativa “Number ONE” había definido los principios de
un crecimiento sustentable y rentable y de un incremento de valor a
largo plazo. Las medidas relacionadas se dirigieron hacia consolidar
la posición de BMW Group como un fabricante Premium de automóviles y
motocicletas a nivel mundial, así como un proveedor de servicios de
finanzas y movilidad.
Evaluación comparativa con lo mejor: récords y éxitos en el
deporte motor.
A comienzos del siglo XX, los eventos deportivos competitivos fueron
considerados como el escenario ideal para fabricantes de motocicletas
y automóviles para impresionar al público automovilista con el
rendimiento de vehículos nuevos. El establecer récords nacionales e
internacionales se percibió como otra manera de proporcionar pruebas
fehacientes de tecnología avanzada. Por ejemplo, en junio de 1919, el
piloto de pruebas Zeno Diemer creó sensación con un récord de altitud
mundial en una aeronave. Diemer voló a una altitud de 9,760 metros en
un avión movido por un motor BMW IV. Los motores BMW alimentaron al
Dornier “Wal” (Ballena), el cual fue el primer hidroavión que dio la
vuelta al mundo en el verano de 1932, y al “rail Zeppelin”, el cual
había logrado un récord en velocidad mundial de 230 km/h para
vehículos ferroviarios en los años previos. El piloto de pruebas para
la fábrica de BMW, Ernst Jakob Henne, estableció varios récords
mundiales entre 1929 y 1937 en dos ruedas. También logró una velocidad
de 279.503 km/h en su último trayecto récord, mismo que se mantuvo
durante 14 años. También se establecieron récords en años más
recientes con el objetivo de demostrar una fuerza innovadora. En el
circuito de prueba de BMW en Miramás, Francia, el prototipo BMW H2R
estableció nueve récords para vehículos alimentados con hidrógeno en
septiembre de 2004.
El primer éxito en carreras para la marca BMW se logró en febrero de
1924. Esa fue la fecha en la que el diseñador y piloto de carreras
Rudolf Schleicher ganó la carrera de montaña en el pronunciado
Mittenwalder Gsteig. A partir de ese momento, el slogan “Probado en el
Deporte – Probado en Serie” (“Erprobt im Sport – bewährt in der
Serie”) se convirtió en un término conocido, respaldado por numerosos
campeonatos alemanes y los primeros éxitos internacionales. La
victoria obtenida por Georg Meier en 1939 con una máquina de carreras
BMW sobrealimentada fue un hito particular. Meier fue el primer piloto
de fuera del Reino Unido en ganar el “Tourist Trophy” en la clase de
500 cc, conocido como el “Senior TT”, en la Isla de Man. El piloto
británico Jock West, también piloto de BMW, llegó en segundo lugar.
Exactamente 75 años más tarde, el piloto del Norte de Irlanda Michael
Dunlop siguió los pasos de Meier y obtuvo una victoria en una BMW S
1000 RR en el “Senior TT”.
“Schorsch” Meier continuó sus éxitos anteriores en el periodo
posterior a la guerra y ganó el German Championship en 1947. Las
máquinas de carreras del equipo alimentadas por motores BMW en el
Sidecar Combination World Championship tuvieron una serie
particularmente impresionante de victorias con 20 títulos de
fabricantes y 19 títulos de pilotos entre 1954 y 1974. En 1980, la BMW
R 80 G/S generó sensación en las competencias todoterreno por primera
vez. A la victoria del European Off-road Championship le siguieron las
victorias en el Rally París-Dakar en los años 1981, 1983, 1984 y 1985.
El primer automóvil producido por BMW también probó su valor en
competencias deportivas desde el inicio. Tan sólo cuatro semanas
después de que el vehículo saliera a la venta, el BMW 3/15 PS logró
una victoria en el International Alpine Rally. El legendario roadster
BMW 328 tuvo su primera aparición en público en la pista de carreras.
En junio de 1936, Ernst Henne probó su éxito en cuatro ruedas
conduciendo el modelo nuevo a una victoria de clase inmediatamente en
la Eifel Race en el circuito Nürburgring. Cuatro años más tarde, la
marca BMW logró uno de sus más grandes triunfos hasta ese momento.
Fritz Huschke von Hanstein y Walter Bäumer ganaron los primeros
lugares en la carrera de resistencia Mille Miglia llevada a cabo en
Italia conduciendo el BMW 328 Touring Coupé.
Inicialmente, la era post-guerra sólo trajo éxitos modestos en el
automovilismo. El “New Class” también causó aquí la primera sensación.
En 1966, Hubert Hahne ganó el European Touring Car Championship
conduciendo el BMW 2000 TI. También, se convirtió en el primer piloto
en llevar un vehículo de turismo (Touring) alrededor del circuito
norte de Nürburgring en menos de diez minutos. La creciente
importancia de las actividades de automovilismo deportivo se manifestó
mediante el establecimiento de BMW Motorsport GmbH en mayo de 1972. En
los años subsecuentes, se lograron varios éxitos principalmente en
carreras de turismo. La colección de títulos se enriqueció con el BMW
3.0 CSL, el BMW 365 CSi, el BMW 320 Group 5 y, más importante, el BMW
M3 Group A, el cual se convirtió en el vehículo de turismo más exitoso
en el mundo.
En 1982, BMW llegó al escenario de la Fórmula 1 como un proveedor de
motores junto con su socio Brabham. El gran triunfo llegó tan sólo un
año después. El piloto brasileño Nelson Piquet ganó el Campeonato
Mundial. Piquet fue el primer piloto en obtener el título conduciendo
un vehículo alimentado por un motor turbo. Como resultado de realinear
su compromiso con el automovilismo, BMW regresó al German Touring Car
Masters (DTM) en 2012. El regreso trajo consigo un éxito máximo de
golpe. El canadiense Bruno Spengler finalizó la temporada de
inauguración conduciendo el BMW M3 como campeón del DTM. BMW también
ganó las clasificaciones de fabricante y equipo.
El producto correcto en el momento correcto.
El camino de ser un fabricante de motores de avión con ventas
principalmente dependientes de contratación de agencias
gubernamentales a ser un proveedor líder de vehículos Premium con
atractivo mundial está estrechamente vinculado con la historia de la
movilidad individual durante los últimos 100 años. Una y otra vez, la
empresa tuvo éxito al utilizar sus habilidades de ingeniería y su
creatividad para crear productos que cumplen de manera exitosa con las
necesidades y los deseos contemporáneos con calidades únicas y un
carácter independiente. Se establecieron segmentos de vehículos nuevos
y se sacó partido de grupos meta adicional con un instinto infalible
para identificar las aspiraciones de los clientes que no eran
cubiertas por otros actores en el mercado. Este estilo también
identificó nichos de mercado con potencial para un crecimiento
sustentable y desarrolló innovaciones que se transformaron en tendencias.
La creciente importancia de la aviación civil durante la década de
1920 animó a Bayerische Motoren Werke a diseñar motores de avión
nuevos y particularmente potentes con base en los diseños probados. El
motor de avión BMW VI, un motor de doce cilindros en V, fue lanzado al
mercado en 1926. Continuó hasta convertirse en un éxito de exportación
alrededor del mundo y se desarrolló como el producto más exitoso de la
empresa en la década de 1920. El BMW VI también se equipó en el
Heinkel HE 70, el cual fue considerado como el avión comercial más
rápido del mundo en ese momento y se le dio el sobrenombre de “Blitz”
o “relámpago”.
La empresa también adaptó de forma precisa su primera motocicleta a
las necesidades del momento. La BMW R 32 fue lanzada en 1923 y contó
con características de manejo seguro y deportivo junto con un nivel
elevado de confiabilidad. El eje de transmisión tenía ventajas claras
de bajo desgaste y mantenimiento mínimo en caminos de tierra. BMW
también tenía como objetivo atraer a clientes sofisticados con sus
primeros automóviles de gama media. Y lo que es más importante, el BMW
326 lanzado en 1936 era alimentado por un motor de seis cilindros de
50 hp y presentaba un exclusivo interior generosamente espacioso así
como una construcción artesanal de alta calidad. Se vendieron cerca de
16,000 unidades y esto lo convirtió en el automóvil más vendido de la
marca hasta ese momento. La empresa estaba en una trayectoria
tecnológica y comercial exitosa con sus motores de avión, sus
motocicletas y sus automóviles antes de que los cambios políticos en
Alemania durante la década de 1930 llevaran a la alineación
internacional de la empresa y a la diversificación en el programa de
producción civil a un cese abrupto.
En la Alemania de la post-guerra, el BMW Isetta reflejó inicialmente
el espíritu de la época durante los años del milagro económico. Se
vendieron más de 160,000 unidades del “Motocoupé” – el vehículo de dos
plazas se solicitaba incluso en EE.UU, el país de los “road cruisers”.
El BMW 700 mantuvo ambiciones deportivas y fue lanzado inicialmente
como un Coupé en 1959 y un poco más adelante como un vehículo de
turismo. Las exitosas ventas de este vehículo aseguraron la
supervivencia de la empresa. En 1961, BMW finalmente lanzó un modelo
en el BMW 1500, el cual hacía falta claramente a sus clientes. Los
estrategas de ventas percibieron la necesidad de un vehículo de
turismo de gama media, de alta calidad. Los ingenieros de diseño
produjeron un automóvil de cuatro puertas con un diseño simplificado y
un potente motor de cuatro cilindros, así como una tecnología avanzada
para el chasis. El “New Class” fue un símbolo de individualidad a un
nivel elevado, y su carácter especial se basó principalmente en
características cómodas y en la deportividad. En 1965, el modelo más
potente hasta ese momento se lanzó con el BMW 1800 TI/SA como
plataforma para el deporte automovilístico – y al mismo tiempo el
nuevo eslogan, que continúa utilizándose hasta la fecha, encapsuló las
razones para el éxito del “New Class”: “Freude am Fahren” – “The
Ultimate Driving Machine”.
Siete años más tarde, “The Ultimate Driving Machine” también se
convirtió en el principio rector de las motocicletas BMW. La empresa
había lanzado anteriormente los nuevos modelos BMW R 50/5, BMW R 60/5
y BMW 75/5 al mercado. El conducir motocicletas se había convertido en
un pasatiempo de ocio placentero que podía disfrutarse de forma
particularmente intensiva en las máquinas de turismo deportivo. En
1980, BMW diseñó el siguiente logro pionero en el segmento de las
motocicletas. La Touring Enduro BMW R 80 G/S fue una precursora de la
popular categoría de motocicletas que continúa generando un placer de
conducción hoy en día en áreas no asfaltadas y en las calles.
Una nueva forma de diversidad también caracterizó el concepto de
vehículo pionero con el cual BMW creó sensación en el sector de
automóviles en 1999. Incluso antes de que se estableciera el auge
global de SUV, la empresa lanzó el BMW X5 en el North American
International Auto Show en Detroit, el cual combinó el desempeño
dinámico típico de la marca con características superiores, una
posición de asiento elevada y tracción integral. Esto anunció el
lanzamiento del segmento Sports Activity Vehicle, en donde BMW también
jugó el papel de pionero ya que transfirió el concepto a otras clases
de vehículos en los años siguientes. La gama ahora consta de cinco
Modelos BMW X, incluidos dos Sports Activity Coupés que permitieron a
la marca conquistar un nuevo territorio conceptual con un gran éxito.
En el umbral del siguiente siglo de su historia corporativa, BMW
Group está asumiendo una función pionera en el diseño de una forma de
movilidad que es independiente de combustibles fósiles y libre de
emisiones locales. Desde 2013, el BMW i3 ha provisto al “Ultimate
Driving Machine” en un automóvil Premium alimentado de manera
eléctrica. Asimismo, el modelo híbrido conectable, el BMW i8,
presentado en 2014 permite a los conductores experimentar el futuro
del vehículo deportivo desde ahora.